Has oído hablar del efecto placebo. En medicina, también existe el « efecto tomate ». Acuñado por el Dr. James Goodwin en 1984, se refiere a cuando un tratamiento es ignorado o rechazado culturalmente, a pesar de ser altamente efectivo.

Un tomate al día puede que no mantenga al médico alejado, pero no siempre fue bien recibido. De hecho, durante mucho tiempo se consideró venenoso, a menudo confundido con un pariente realmente venenoso, la belladona . Y si bien es cierto que los tallos y las hojas (y los frutos verdes) de las tomateras contienen tomatina, un alcaloide tóxico que puede causar erupciones, se necesitarían grandes cantidades para causar efectos nocivos reales .

Hoy en día, esperamos con ansias los tomates cada verano y los comemos con avidez, pero ¿sabías que hay un pequeño t

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