La Asociación de Vecinos del Paseo Marítimo de Palma ha acusado a una empresa naviera de permitir a sus clientes dejar montones de basura en plena calle , saturando las papeleras e «ignorando los contenedores de reciclaje situados a sólo 30 metros».

Esta entidad vecinal que preside Antonio Ruiz acusa a esta empresa, situada en pleno centro del recién renovado Paseo Marítimo, de practicar «simple ecopostureo ».  Y es que esta empresa que ofrece amarres para embarcaciones chárter presume en su web de tener una actitud «cuidadosa con el medio ambiente», aunque no se corresponde con la realidad.

En las imágenes que ha publicado la Asociación de Vecinos del Paseo Marítimo de Palma en su cuenta oficial en la red social X se pueden ver numerosas bolsas de basura por el suelo, cajas con botellas de vidrio y cajas de cartón con latas de cerveza vacías.

Desde la entidad vecinal han acusado a la empresa de lavarse las manos con esta situación. « El empleado de la garita nos responde que lo que hagan sus clientes fuera no es cosa suya », han asegurado en redes sociales los vecinos.

Suciedad e incivismo en el Paseo Marítimo de Palma

La Asociación de Vecinos del Paseo Marítimo de Palma ya denunció hace unas semanas la suciedad y el incivismo que se han apoderado de la zona. La entidad indicó que a pesar de las obras de remodelación y embellecimiento de esta zona de primera línea de la capital balear , los vecinos, comerciantes y hoteleros están hartos del « abandono institucional » que sufren y la pésima imagen  que proyecta el lugar.

En un duro comunicado denunciaron la « suciedad acumulada, episodios de inseguridad y un desorden urbano cada vez más evidente » que están provocando un «malestar creciente» en unos empresarios y comerciantes que están viendo cómo los resultados de las obras no están siendo como creían .

El Paseo Marítimo se ha convertido en un basurero para las personas que salen de fiesta por la zona. Botellas de alcohol, papeles de todo tipo y restos de comida se amontonan en el «deteriorado» mobiliario urbano y en el renovado pavimento, que ya se ha quedado marcado  por la suciedad.

Por si fuera poco, el Paseo Marítimo de Palma también se ha convertido en un urinario público , donde tanto a hombres como mujeres se les ha visto  orinar e incluso defecar en la vía pública  a altas horas de la madrugada y por la mañana, tras toda una noche de fiesta y desenfreno.

Para poner freno a esto, la asociación vecinal ha exigido instalar  baños públicos en la zona , hacer cumplir la ley en la venta nocturna de alcohol en minimarkets, más vigilancia policial y  obligar a los locales que cedan sus baños  para todo el que lo necesite.