El acceso al agua segura continúa siendo uno de los mayores desafíos en el país. Mientras informes oficiales advierten sobre la disminución de la producción de agua potable en Lima Metropolitana y estudios sanitarios han detectado presencia de coliformes fecales y metales pesados en distintas regiones, el Banco Mundial anunció un programa de gran escala para fortalecer la infraestructura y la gestión de este recurso.
El Directorio Ejecutivo de la entidad financiera aprobó un financiamiento de 200 millones de dólares destinado a mejorar el tratamiento de aguas residuales, implementar estrategias de economía circular en el sector y ampliar la cobertura de servicios de agua y saneamiento en Lima y Puno. Se trata de un plan de diez años que busca no solo ampliar el acceso a agua po