Israel ha enviado a los más de 450 activistas de la Flotilla detenidos a la prisión de Saharonim, en el desierto del Neguev del sur de Israel, a excepción de los cuatro parlamentarios y eurodiputados italianos que formaban parte de la misión, que han sido expulsados del país hebreo y han tomado un vuelo regular hacia Roma, según ha anunciado el ministerio de Exteriores italiano.
Una vez en la prisión, un funcionario de la prisión ha contado a varios periodistas que "la mayoría" de los arrestados han aceptado ser deportados. Estas, según ha indicado una fuente diplomática europea, embarcarán en aviones para dejar Israel lo antes posible, seguramente en los próximos dos días.
Sin embargo, los que no han accedido deberán comparecer ante un juez, que decidirá sobre su deportación forzosa, lo