La sede del Museu Martítim de Mallorca en Ses Voltes de Palma, que llevaba casi dos años cerrado al público tras detectarse, reabió ayer por todo lo alto con un concierto de Pere Andreo, una ballada popular con Antic Cofre y una gran fideuá preparada por la Federación Balear de Cofradías de Pescadores. La reapertura ha implicado un lavado de cara completo que mejora la experiencia inmersiva del visitante.

La exposición permanente se distribuye en cinco salas expositivas y un espacio educativo, con recursos audiovisuales que ofrecen una experiencia inmersiva para todos los públicos. El proyecto se fundamenta en tres ejes temáticos principales: la preservación del patrimonio marítimo subacuático y terrestre, la biodiversidad marina y la creación de un espacio para la reflexión y debate de c

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