China ha iniciado pruebas con un novedoso sistema de seguridad destinado a reducir el riesgo de incendios en vehículos eléctricos: la expulsión de la batería sobrecalentada fuera del automóvil.

La iniciativa, que ha generado debate en redes sociales, busca evitar que un fallo en este componente provoque un incendio mayor dentro del coche.

La propuesta funciona de forma similar a un airbag. En lugar de desplegar una bolsa de aire para proteger al conductor, los sensores detectan un aumento peligroso de temperatura en la batería y, en una fracción de segundo, la liberan hacia el exterior del vehículo.

Un video difundido en la red social Weibo muestra cómo este mecanismo fue probado en un Chery iCar 03T , vehículo que aparece identificado con el logotipo del Centro de Investigación y Tecno

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