El gobierno del presidente Donald Trump anunció un programa que ofrece 2,500 dólares a niños migrantes no acompañados para que regresen de manera voluntaria a sus países de origen , una medida que ha generado críticas de organismos internacionales y defensores de derechos humanos.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) informó que el programa busca “reducir la saturación” en los centros de detención migratoria y “promover el retorno seguro y ordenado” de menores provenientes principalmente de México, Guatemala, Honduras y El Salvador.

Los beneficiarios recibirán el apoyo económico junto con transporte cubierto hacia sus países. Sin embargo, el plan ha sido señalado como un intento de presionar a los menores para abandonar sus solicitudes de asilo , aprovechando su vulnerab

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