El exigente circuito de Singapur, en Malasia, volvió a ser un calvario para el piloto argentino Franco Colapinto (Alpine), quien apenas pudo largar y finalizó en la 16.ª posición. Una vez más, mostró su frustración ante un monoplaza que se vuelve inmanejable en determinados momentos y no le permite desplegar todo su potencial como piloto.
El año pasado, con Williams, había terminado 11.º; este año, 16.º, tras haber estado 12.º en pista en su mejor momento y avanzar tres posiciones en los primeros metros.
Nuevamente, la estrategia planteada por Alpine fue errada: inició la prueba con neumáticos blancos, esperando la aparición de un coche de seguridad tras algún choque, algo que no ocurrió. Esto obligó a estirar su ingreso a boxes hasta la vuelta 15, cuando cambió por neumáticos medios (lo