Ellos la habían roto. Los hermanos habían pertenecido al entorno cercano de Esteban Alvarado y tras un problema personal pasaron a tributar para Ariel Guille Cantero . “Es el único que me puede proteger”, dijo Mariana Ortigala antes de ser detenida.

LEER MÁS ► Juego clandestino: Leonardo Peiti confirmó que pagaba coimas y la situación del senador Traferri se complica si Patricio Serjal es condenado

En ese trajín de permanentes traiciones se convirtieron, como otra manera para sobrevivir, en testigos, en delatores de su exjefe Esteban Alvarado, mientras continuaban con su negocio de las extorsiones y con una fina tarea de pasar información a Los Monos para que recaudaran con las exigencias que hacían a los comerciantes —a los tiros— para que pagaran por protección.

La detención

See Full Page