Las altas temperaturas no afectan solo a las personas; las plantas también sufren las consecuencias de las olas de calor que cada vez son más frecuentes en Argentina. Para evitar que se marchiten o dañen, es fundamental adaptar su cuidado a estas condiciones extremas.
Uno de los aspectos más importantes es el riego. Los expertos recomiendan regar las plantas bien temprano por la mañana o al anochecer, ya que hacerlo en estos horarios evita que el agua se evapore rápidamente y permite que las raíces la absorban de manera óptima. "El riego es clave, pero hacerlo en cualquier momento del día no es lo más efectivo", señalan. Por el contrario, regar al mediodía puede dañar las raíces debido al agua caliente.
En cuanto al césped, es aconsejable no cortarlo demasiado bajo durante días de calor