De un pueblo malagueño a la pantalla del móvil, sin soltar la llana. Juan Diego Rodríguez, albañil de una familia de constructores, abrió TikTok en 2020 casi por accidente: su prima le creó la cuenta una noche, subió un vídeo que ya tenía en el móvil y a la mañana siguiente vio 300 seguidores y 4.000 visualizaciones . Decidió preparar material durante un mes y publicar a diario. En diciembre sumaba 10.000 ; al año, 300.000 . “ Abrí TikTok y en un año llegué a 300.000 seguidores, pero yo ya tengo mi clientela ”, resume en una entrevista en el podcast 'Sector Oficios'.
Viralidad con freno de mano
La exposición no le cambió la hoja de ruta. A diario le llegan solicitudes de presupuesto , pero su prioridad es la cartera de clientes que lo ha sostenido desde siempre. “Tengo all