Entre el repertorio clásico del boricua, "Te entrego la pista, Tino" , se escuchó antes de que el joven tomara el centro del escenario . Lo que siguió fue una secuencia impecable de pasos sincronizados, giros limpios y una conexión con el público que rara vez se ve en debutantes. Las cámaras captaron cada instante, incluyendo la sonrisa de orgullo de Ricky, quien desde un costado observaba cómo su heredero robaba cámara sin esfuerzo.
Detalles que definieron el momento:
Valentino eligió como soundtrack un remix de "Livin' la Vida Loca", fusionando percusiones urbanas con el clásico paterno.
Su outfit —chaqueta de cuero desestructurada over size y tenis retro— generó tendencia en redes minutos después.
La coreografía incluyó un salto mortal que terminó en pose de brazos abiertos, rep