De acuerdo con los primeros reportes, los conductores de las unidades también fueron retenidos dentro del sitio donde se encuentran las pipas, el cual anteriormente funcionaba como una estación de bomberos.
Los elementos federales revisan la documentación correspondiente para determinar la procedencia del combustible y si todo se encuentra en regla.
Hasta el momento, no se ha confirmado si se trata de un caso de contrabando o si las unidades contaban con los permisos necesarios para operar.
Las autoridades mantienen resguardada la zona mientras continúan con las investigaciones.