La Semana de la Moda de París abrió sus puertas con una edición marcada por la creatividad y el espíritu vanguardista, consolidándose como el evento más esperado de la industria. Durante varios días, la capital francesa se convirtió en el epicentro de la moda mundial, con más de un centenar de desfiles que presentaron las propuestas de primavera-verano 2026.
Los diseñadores apostaron por la experimentación y la mezcla de estilos, incorporando nuevas tecnologías en los tejidos, accesorios transformables y siluetas arriesgadas que redefinen los códigos tradicionales de la alta costura. Se observaron desde cortes minimalistas con colores neutros hasta explosiones de tonalidades vibrantes, con un énfasis especial en la sostenibilidad y la reutilización de materiales.
Las calles parisinas tam