C uando parecía que Milwaukee tenía el control de la Serie Divisional de la MLB , los Cubs saltaron al diamante decididos a cambiar la historia. En un primer inning donde todo les salió bien, Chicago fabricó cuatro carreras que marcaron el ritmo del Juego 3 en Wrigley Field.

Michael Busch , una vez más, fue el catalizador con un cuadrangular de apertura, su segundo de la serie en esa misma situación, y lo siguió un rally encabezado por Pete Crow-Armstrong , quien remolcó dos con un sencillo, más una carrera extra vía wild pitch. El abridor de los Brewers, Quinn Prister , no logró completar la entrada, dejando la loma tras una actuación descontrolada que pagó caro su equipo.

Mientras tanto, Milwaukee intentó responder con destellos ofensivos, pero nunca logró empatar el encue

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