Matthew Boyd cambió la historia. Después de haber sido castigado en el Juego 1, el zurdo de Chicago subió a la loma y puso fin a la racha de tres encuentros en los que se habían permitido carreras en la primera entrada. Esta vez no sólo colgó el cero inicial, sino que guió a los Cachorros a una victoria por blanqueada de 6-0 sobre los Cerveceros de Milwaukee para empatar la Serie Divisional de la Liga Nacional a dos triunfos por lado.

Boyd había tenido una apertura para el olvido en su primera salida de la serie, cuando apenas retiró a dos de los ocho bateadores que enfrentó y cargó con la derrota tras permitir seis carreras (sólo dos limpias). La revancha llegó una semana después: comenzó con base por bolas sobre Christian Yelich, pero de inmediato recuperó el control y maniató a la ofen

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