Ciudad de México, a 10 de octubre de 2025 .- Una verdadera reconciliación no puede existir sin la garantía de poder profesar libremente la propia fe. Este derecho no es un «privilegio» otorgado por las instituciones, sino una condición esencial para la formación de sociedades justas, en las que la conciencia humana tenga amplio margen para formarse y expresarse concretamente. Este principio sustenta la reflexión que el Papa León XIV ofreció a la delegación de la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada, recibida en audiencia esta mañana, 10 de octubre, en el Aula de los Papas del Palacio Apostólico Vaticano.
No abandonemos a los cristianos perseguidos
El Pontífice inició su discurso recordando la creciente hostilidad y violencia perpetrada contra diversas comunidades religiosa