Brasil bailó ante Corea del Sur al ritmo que marcaron Rodrygo y Vinicius. Los dos extremos del Real Madrid lideraron, junto a Estevao, la 'manita' que le endosó la Canarinha al combinado asiático en un amistoso disputado este viernes en Seúl que sirvió para reactivar al paulista y mantener al fluminense con la velocidad de crucero que ha alcanzado en las últimas semanas. Disfruta la Verdeamarela y aún más lo hace Carlo Ancelotti, que no pudo tener un reencuentro más feliz con quienes fueron dos de sus atacantes de referencia durante la segunda etapa del transalpino en Chamartín.
Con el billete ya sellado para la Copa del Mundo que se celebrará el próximo año en Estados Unidos, Canadá y México, la selección brasileña programó dos amistosos en la ventana de octubre con el objetivo de seguir