La decisión representa una victoria para los líderes demócratas del estado y la ciudad, quienes han calificado el despliegue como innecesario e inconstitucional. El gobernador J.B. Pritzker celebró la decisión judicial y afirmó que “no hay cabida para la Guardia Nacional en las calles de ciudades estadounidenses como Chicago”.

El juez sostuvo que la administración federal violó la Décima y la Decimocuarta Enmienda, que protegen la autonomía de los estados y garantizan el debido proceso. También cuestionó la fiabilidad del relato presentado por el Departamento de Seguridad Nacional sobre los disturbios en un centro de ICE en Broadview.

La demanda fue presentada por el estado y la ciudad el lunes, mientras 500 efectivos de la Guardia Nacional (ya en Illinois) se dirigían a un centro de res

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