En el corazón de la capital larense, justo en la popular comunidad de Zanjón Barrera , la tranquilidad se ha cambiado por una angustia palpable. Aquí, donde la vida se teje entre las carreras y calles del centro de Barquisimeto, dos familias viven bajo el terror constante de un colapso. Sus casas, más que hogares, son estructuras deplorables que se caen a pedazos, ignoradas por la ayuda gubernamental prometida una y otra vez.
La situación no es solo de precariedad; es de un miedo profundo por la vida de sus hijos.
El «Peligro» de la Carrera 16
Nuestra primera parada es la carrera 16 con calle 16. Allí, nos recibe Maira Ochoa , una mujer que lleva la preocupación dibujada en el rostro. Su casa, donde conviven más de 10 personas, incluyendo a siete niños , está literalmente desmoron