La publicación de ‘Dilexi te” ‘Te he amado”-, la primera exhortación apostólica del Papa León XIV, representa mucho más que un texto doctrinal. Es una declaración de continuidad espiritual y una reafirmación del rumbo que la Iglesia comenzó a recorrer bajo el impulso del Papa Francisco. El nuevo Pontífice elige como punto de partida un mensaje que no elude la realidad, que se atreve a mirar al sufrimiento humano sin filtros ni complacencias.
En la exhortación, León XIV denuncia con firmeza ‘la economía que mata”, expresión que retoma de su antecesor, y advierte sobre la creciente desigualdad que asfixia a millones, especialmente en Europa, donde la pobreza deja de ser una estadística para convertirse en una herida abierta. Con especial sensibilidad, el Papa señala la ‘doble vulnerabilidad