El avance de las medidas de seguridad en la Fórmula 1 y la reducción de incidentes de elevadísima peligrosidad (quizá el último es el de Romain Grosjean y su incendio en Bahréin 2020 ) en la categoría reina provocan al aficionado, normalmente el menos habitual, pueda caer en la infravaloración de lo que es un golpe en la categoría reina. Con velocidades desorbitadas, fuerzas G golpeando a los pilotos y muchos circuitos, como el de Arabia Saudí como máximo exponente, que van al límite del límite.
Pero un accidente y casi cualquier golpe en la F1 pone los pelos de punta a todos. Y muchos se conoce mucho después lo verdaderamente peligrosos que son. El último del que se han conocido detalles y uno que no parecía tal cosa pero sirve para abrir un debate es el de Esteban Ocon duran