La vida les puso una meta distinta, el camino más difícil, la partida más complicada. Ellos y ellas lo transformaron en combustible. Le sobra fuerza para superar cada reto. Lo hemos visto en los últimos días: hace una semana el Perú celebró dos medallas en el Mundial de Paratletismo de Nueva Delhi , las primeras que se ganan en este evento desde que se disputa desde 1994. Un hito. Es un logro para el país, pero más –mucho más–, para los deportistas, sus familias y quienes los rodean.
Natural de Paucartambo, Neri Mamani inició su carrera en Cusco, sin zapatillas, pero con mucha ilusión. La falta de vista fue impulso más que impedimento. Sin ser atleta, ganó su primera prueba de 6km en Tacna en el 2019. Dejó a su madre en su pueblo y se dedicó al deporte, pero la falta de recursos la