El pasado 28 de abril , alrededor de las 12:30 horas de la mañana, España vivió un colapso eléctrico histórico. No fue un fallo técnico aislado, sino que consistió en una reacción en cadena que dejó sin suministro a 50 millones de personas en la Península y parte del sur de Francia. En cuestión de minutos, se paralizaron trenes, ascensores y comunicaciones, lo que provocó una incertidumbre generalizada.
El apagón del pasado abril, ya encendió las alarmas en Bruselas, que diseñó un kit de emergencia para sobrevivir, al menos, 72 horas sin ayuda externa. Entre esos elementos recomendados, se encontraban agua potable, alimentos no perecederos, un botiquín de primeros auxilios, linterna, radio de pilas y batería externa para cargar el móvil.
Durante estas últimas semanas, Red Eléc