En 1977, el radiotelescopio Big Ear de la U. del Estado de Ohio, recibió, durante 72 segundos, una misteriosa señal desde el espacio exterior.

La señal fue registrada en papel por un computador. Días después, al revisar el registro, el astrónomo Jerry Ehman, emocionado, tomó un lápiz y escribió al lado de la señal la palabra “Wow!”.

Desde entonces, se conoce como la señal Wow! hasta ahora considerada por muchos como la única prueba de la existencia de vida inteligente fuera de la Tierra.

Aunque con las décadas han aparecido explicaciones más naturales para su origen, no todos están de acuerdo.

Uno de ellos es el astrofísico de la U. de Harvard, Avi Loeb, que ha sugerido que la señal no es un simple fenómeno natural, sino una transmisión proveniente de un objeto interestelar.

Según Loe

See Full Page