La investigación se inició el pasado mes de abril tras una denuncia presentada en Santa Cruz de Tenerife por una víctima que fue estafada mediante técnicas de ingeniería social como el "hijo en apuros", smishing y vishing a través de mensajería instantánea. A partir de esta denuncia, los agentes lograron destapar una red criminal compleja y altamente estructurada, cuyo número de afectados no ha cesado de crecer.
Hasta la fecha, se han identificado a más de 155 víctimas en todo el territorio nacional y se ha podido cuantificar el fraude por encima de 1.100.000 euros, solo en los casos ya denunciados ante la Policía Nacional. No se descarta que esta cifra aumente a medida que avancen las diligencias.
La red criminal estaba altamente estructurada con ramificaciones a nivel nacional qu