A nueve días del fallecimiento de Miguel Ángel Russo, su esposa, Mónica Crovara, habló por primera vez sobre la partida del entrenador y, en medio del dolor, dejó un deseo sobre cómo le gustaría que lo recuerden los hinchas: "revoleando el saco", en alusión a la icónica imagen del clásico rosarino.
En diálogo con la prensa de Rosario, Crovara se mostró aún conmovida por las innumerables muestras de cariño. "Estuve muy aturdida porque pasaron muchas cosas desde la terminación de su enfermedad, que tampoco me la esperaba", confesó.
Con una profunda admiración, describió la pasión que movía al DT: "Yo siempre estuve atrás de él apoyándolo, porque él seguía. Era una persona que amaba el fútbol y yo siempre le decía al núcleo familiar: 'para Miguel el 99% es fútbol y en el 1% estamos nosotros