
Los lobos forman parte de la cultura popular, lo que ha llevado a que los humanicemos. Por eso algunas personas todavía se escandalizan cuando se enteran de la autorización de su caza en España.
En el otro extremo están los que se creen el mito del lobo feroz y ven al animal como a un villano muy peligroso. Sin embargo, la ciencia acaba de darle la vuelta. Un estudio publicado en la revista científica Current Biology ha demostrado que los lobos no son tan temibles como pensamos.
La realidad es que son animales profundamente aterrorizados por la presencia del hombre . Por increíble que parezca, huyen si notan que hay humanos incluso en espacios legalmente protegidos.
El experimento científico que demuestra que los lobos temen a los humanos
El experimento se desarrolló en los bosques de Tuchola, en el centro-norte de Polonia, y cubrió una zona de más de 1.100 kilómetros cuadrados. Los investigadores instalaron cámaras y altavoces ocultos que se activaban cuando un animal se acercaba a menos de diez metros.
Al reproducir sonidos de personas hablando en tono tranquilo, ladridos de perros o ruidos naturales como el canto de los pájaros, los científicos observaron un patrón muy claro.
Aunque pueda sorprendernos, los lobos eran más del doble de propensos a huir tras oír voces humanas y lo hacían dos veces más rápido que ante cualquier otro sonido.
El mismo comportamiento se repitió en ciervos y jabalíes, lo que confirma que el simple sonido del habla humana es suficiente para generar una reacción de miedo inmediato en la fauna silvestre.
«Los lobos no son una excepción en su temor hacia los humanos, y tienen buenas razones para temernos» , explicó la coautora del estudio, Liana Zanette.
La prueba de que los humanos son los verdaderos depredadores de los lobos
El trabajo científico apunta a una conclusión contundente: el auténtico superdepredador del planeta no es el lobo, sino el ser humano
Según los datos recogidos, las personas matan presas a un ritmo mucho mayor que cualquier otro depredador , y eliminan grandes carnívoros, como los lobos, nueve veces más rápido de lo que sería su mortalidad natural.
Esa es la explicación de por qué los lobos han adaptado su comportamiento para evitar el contacto directo. Son 4,9 veces más activos por la noche que los humanos durante el día , una estrategia para mantenerse alejados de nosotros.
Zanette ha subrayado que «la protección legal no significa ausencia de miedo», ya que incluso en regiones con leyes que los amparan, como la Unión Europea, los lobos mueren siete veces más de lo que sería natural , tanto por causas legales como ilegales.
La clave para una mejor convivencia entre el lobo y el hombre
Muchos ganaderos se quejan de los destrozos que hace el lobo en su economía, por lo que es habitual que países como España permitan su caza en circunstancias muy concretas.
Sin embargo, los expertos consideran que los lobos sólo se acercan a lugares con humanos por necesidad extrema . Es decir, para que se acerque a una granja debe estar verdaderamente hambriento.
Por ello el estudio propone reorientar el debate hacia la educación pública, promoviendo mejores prácticas en el almacenamiento de alimentos, la gestión de residuos y la protección del ganado.