La incertidumbre se volvió parte de la rutina para cientos de pequeñas y medianas empresas proveedoras de la industria energética. En medio de un escenario de baja actividad y fuerte capacidad ociosa, muchas pymes denuncian que la política de precios dinámicos de YPF, conocida como “micropricing”, agrava aún más su situación financiera y operativa.
La medida permite modificar el precio de los combustibles varias veces al día, sin previo aviso público. Para las pymes que dependen del transporte para abastecer obras y servicios, esto implica operar a ciegas. “No se puede planificar ni calcular un costo real de logística. Vamos a cargar sin saber cuánto vamos a pagar”, señaló el dueño de una empresa de servicios industriales de Neuquén.
Las quejas se multiplican en un contexto económico del