No es una buena decisión incorporarse a formar parte de la ya elevada cantidad de conciudadanos sumidos en el “síndrome de la rana”, ante la situación política que atraviesa España, con el sanchismo al frente del gobierno. Ello por cuanto supone pagar un precio inasumible para el presente y futuro de España y la democracia, y que debe evitarse. Así que es conveniente reiterar lo que significa el tener a un auténtico Frente Popular instalado al frente del Poder Ejecutivo del Estado. Denominarlo como un Frente Popular no es una licencia literaria ni tampoco mera retórica, sino que es una exacta definición de su realidad: una coalición social comunista apoyada en unos aliados parlamentarios que son los sucesores políticos de ETA, y unos partidos nacionalistas que desde el gobierno de la Gener
En Bilbao, cantando en árabe la Internacional

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