La última vez que se habló por aquí del cuarteto que nació en Granada fue a cuenta de que en el momento más crítico del covid tuvieron que desinfectar (y certificarlo) cada una de las copias del disco que acaban de publicar. Pero debiera ser un nombre mucho más conocido más allá de su nicho, sea por su amplia discografía ya de una decena de referencias, por sus continuas giras intercontinentales, o por ser los más que dignos sucesores de la camada punk (¡con siglas!) de los años ochenta: TNT, KGB o SOS.
Por seguir en esa línea, grabaron varias veces en los estudios de PPM (pueden sonreír, sí). Pero sobre todo por uno de los mejores directos que se pueden escuchar ahora mismo: hiperenergéticos e hiperdinámicos, con la lengua bien afeitada y un nivel literario notable, como de compromiso so