El nuevo gravamen a productos como cigarros, refrescos y bebidas endulzadas ha encendido las alarmas entre los pequeños comerciantes potosinos.
Armando Reyes, presidente de la Cámara Nacional de Comercio en Pequeño (Canacope), calificó la medida como "una exageración" y advirtió que este tipo de decisiones podrían ser el golpe final para muchos negocios que ya operan al límite.
"Nos parece una medida exagerada y fuera de lugar. Los consumidores ya están batallando para sostenerse y nosotros como comerciantes también. Con este tipo de impuestos, lo único que se logra es que cierren más tiendas y empresas", expresó Reyes.
El dirigente recordó que las ventas en el sector minorista ya venían en caída desde que se implementaron restricciones en las escuelas para la venta de botanas, refresco