A pesar que este lunes 20 de octubre fue decretado como Día de Júbilo Nacional no laborable, por la canonización de José Gregorio Hernández y Carmen Rendiles, el centro de la ciudad de Maturín y el sistema de transporte público operaron con normalidad.
Desde tempranas horas, el movimiento comercial fue evidente en las principales avenidas y zonas céntricas de la capital monaguense. Comerciantes, trabajadores informales y establecimientos mantuvieron sus puertas abiertas atendiendo al público, mientras que el flujo vehicular y de unidades de transporte urbano se desarrolló sin mayores contratiempos.
Algunos trabajadores señalaron, que aunque reconocen la importancia histórica y espiritual del día, la situación económica los obliga a mantener sus actividades. “Es un día importante para el