El Museo del Louvre, uno de los símbolos culturales más reconocidos del planeta, fue escenario de un audaz robo que dejó atónitos a los parisinos. En apenas siete minutos, tres ladrones se apoderaron de varias joyas pertenecientes a la colección napoleónica, piezas de un valor histórico imposible de calcular.
El asalto ocurrió el domingo 19 de octubre, cuando el museo recién abría sus puertas al público. De acuerdo con el ministro del Interior de Francia, Laurent Nuñez, los delincuentes utilizaron un camión equipado con una plataforma elevadora para alcanzar una ventana del primer piso, forzarla y entrar a la Galería Apolo, donde se exhiben las joyas de la corona francesa.
Un golpe planificado al milímetro
La intervención fue rápida y silenciosa. Según The New York Times, los intrusos d