Tel Aviv.- Dos enviados del presidente estadunidense, Donald Trump, viajaron a Israel el lunes para apuntalar el alto al fuego en Gaza, un día después de que la violencia mortal pusiera a prueba el frágil acuerdo.
La tregua parecía seguir mientras Israel recibía los restos de otro rehén en Gaza y permitía que las entregas de ayuda se reanudaran al territorio devastado. El portavoz de Naciones Unidas, Stéphane Dujarric, no dijo cuánta ayuda estaba entrando.
Israel amenazó el domingo con detener los envíos de ayuda humanitaria a Gaza y sus fuerzas mataron a decenas de palestinos en ataques allí tras acusar a milicianos de Hamás de matar a dos soldados. Israel avisó al final del día que respetaría el cese al fuego de nuevo.
El enviado especial estadunidense, Steve Witkoff, y Jared Kushner,