Tras la muerte de su padre en 2018, una mujer británica decidió rendirle homenaje con un tatuaje en el brazo hecho con tinta negra mezclada con sus cenizas , que pronto se convirtió en una experiencia marcada no solo por el arte en la piel, sino también por la reacción de su cuerpo.
“Mi padre estaba cubierto de tatuajes sentimentales con cosas como los nombres de sus hijos”, contó la británica Tammie Lunt a la revista estadounidense Newsweek sobre la costumbre que la inspiró a honrarlo con la frase “Siempre conmigo”.
“Luchó contra tantas enfermedades y desafíos en sus últimos años antes de fallecer. Papá era mi héroe. Trabajó duro por todos nosotros para asegurarse de que tuviéramos lo que necesitábamos. Quería hacerlo como símbolo de mi amor por él , una muestra de honor por todo l