El vasto y árido desierto de Pilbara, en Australia Occidental, se convirtió hace unos días en el epicentro de una intriga que capturó la atención de medios y entusiastas del espacio por igual. Todo comenzó cuando trabajadores de la minera BHP, durante sus labores rutinarias, realizaron un hallazgo que los dejó totalmente desconcertados.
En medio del terreno rojizo y seco, encontraron un trozo de material carbonizado que yacía, misteriosamente, en llamas. El insólito espectáculo tuvo lugar en una remota carretera, a unos 30 kilómetros al este de la localidad de Newman, un lugar tan inhóspito como inesperado para semejante descubrimiento.
El hallazgo, rápidamente filtrado a las redes sociales, hizo que todo tipo de usuarios empezara a especular sobre el origen de este objeto. La imagina