Bloomberg Businessweek
Un emprendedor keniano transforma el ancestral hábito de mascar khat en un lucrativo negocio de bebidas energéticas que conquista a la clase media y reta el limbo legal del país. octubre 22, 2025 | 7:49 hrs
Cuando Brian Kiriba regresó a su natal Kenia tras pasar gran parte de su juventud en el extranjero, descubrió que sus amigos se dedicaban a masticar khat, un estimulante suave que los africanos del este han usado por siglos. Kiriba se metió un puñado en la boca y no le gustó. Las hojas amargas le rasparon el paladar y le cortaron la lengua, haciéndole cuestionar por qué alguien dejaría los clubes de Nairobi para pasar las noches en cuartos oscuros mascando khat. Entonces llegó el efecto narcótico. “De repente, lo entendí”, recuerda. “Pero supe que tenía que ha