Este miércoles, el Museo del Louvre reabrió sus puertas al público, tres días después del robo de nueve joyas históricas de la Corona, valoradas en más de 100 millones de dólares según la fiscalía francesa.

El atraco, perpetrado por cuatro delincuentes en la Galería del Apolo, ha sido catalogado como uno de los más importantes en décadas dentro del mundo del arte.

Aunque el museo volvió a recibir visitantes desde las 09:00 horas locales, la Galería del Apolo permanecerá cerrada mientras continúan las investigaciones.

Entre las piezas sustraídas se encuentran una diadema de perlas de la emperatriz Eugenia y un conjunto de collar y pendientes de zafiros de la reina María Amelia.

Una de las joyas fue extraviada por los ladrones durante su huida.

La presidenta directora del Louvre, Lauren

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