La directora del Museo del Louvre reconoció el miércoles un “terrible fracaso” en el emblemático monumento parisino tras un impactante robo a plena luz del día de las joyas de la corona, y afirmó que ofreció su renuncia, aunque esta fue rechazada.
El Louvre reabrió sus puertas más temprano ese mismo día, con largas filas bajo su emblemática pirámide de cristal, por primera vez desde que uno de los robos más notorios del siglo en un museo sorprendiera al mundo por su audacia y magnitud.
En su testimonio ante el Senado francés, la directora del Louvre, Laurence des Cars, reconoció que el museo sufría una grave escasez de cámaras de seguridad en el exterior del edificio, además de otras “debilidades” que quedaron al descubierto con el robo del domingo.
Bajo fuerte presión por un robo que m