A ti ciudadano.
Los platitos de barro miniatura para ofrendas de Día de Muertos son pequeñas obras de arte que recrean, con detalle y ternura, los alimentos que los difuntos amaban en vida.
Estas piezas representan uno de los elementos más entrañables de la tradición mexicana: el deseo de compartir, aunque sea en forma simbólica, la comida que une a vivos y muertos cada noviembre.
Estas artesanías se elaboran a mano con barro, al igual que los utensilios tradicionales, pero a una escala diminuta. En ellos, los artesanos modelan platos de mole, arroz, pan de muerto, tamales, atoles o tacos, hechos también de barro y pintados con pigmentos naturales o acrílicos para lograr un realismo sorprendente.
Su tamaño puede variar, aunque generalmente miden apenas unos centímetros de diámetro, lo