Si Zohran Mamdani es elegido próximo alcalde de Nueva York, se enfrentará al próximo aniversario del 11 de septiembre de 2001 como un hipócrita indisimulado o lo suficientemente honesto como para revelar su desprecio expansivo por una nación que sigue siendo el faro de la libertad en todo el mundo.
Por mucho que lo intente, en ese solemne día de conmemoración, Mamdani no podrá tener las dos cosas.
Hasta la fecha, sus referencias al 11-S no revelan ni siquiera un indicio de dolor por los miles de estadounidenses que murieron aquel día. En lugar de ello, relata cómo el ataque terrorista le hizo sentirse aislado del resto de nosotros , negándose a sugerir que el 11 de septiembre de 2001 todos nos convertimos en neoyorquinos .
The New York Post le cita diciendo: "Sigue existiendo