Un japonés de 38 años fue arrestado bajo sospecha de fraude después de aprovechar un fallo de una aplicación de entrega de comida a domicilio para recibir ilegalmente más de 1.000 pedidos sin pagarlos.

Durante más de dos años, Takuya Higashimoto, un desempleado residente en Nagoya, se aprovechó de la política de cancelación de pedidos de una importante plataforma nipona de reparto para cometer el fraude.

Lograr esto sin ser detectado no fue tarea fácil. Los investigadores descubrieron que el estafador usaba 124 cuentas en la aplicación de reparto Demae-can, muchas de ellas registradas con nombres y direcciones falsos.

Higashimoto solía usar tarjetas prepago para registrar una cuenta y cancelar su suscripción a los pocos días. Esto dificultó enormemente que la plataforma detectara y detu

See Full Page