En toda cocina, la heladera es el electrodoméstico que más trabaja y más se ensucia. Entre restos de comida, derrames y envases olvidados, puede convertirse rápidamente en un foco de malos olores y bacterias. Pero su limpieza no es solo una cuestión estética: mantenerla en condiciones óptimas es clave para la salud, la seguridad alimentaria y el ahorro energético.
Con el paso del tiempo, los residuos acumulados en bandejas y juntas pueden generar moho y contaminación cruzada, afectando la frescura de los alimentos. Además, una heladera sucia o con escarcha excesiva consume más energía para enfriar, elevando el gasto eléctrico.
Los especialistas en limpieza y mantenimiento coinciden en que una rutina regular y algunos trucos sencillos bastan para conservar este aparato esencial en su mejo

La Voz del Interior
The Babylon Bee
AlterNet
RadarOnline
NBC10 Philadelphia Sports
NHL Arizona Coyotes
Columbia Daily Tribune Sports
Essentiallysports College Sports
New York Post
The Atlanta Journal-Constitution Sports