Los Azulejos de Toronto recurrirán a Max Scherzer en el Juego 3 de la Serie Mundial el lunes y luego le darán la bola Shane Bieber para el Juego 4 el martes.

En 5.2 entradas, en las que Scherzer luchó con el control y su propia mecánica, permitió tres hits, un jonrón, dos carreras, otorgó cuatro bases por bolas y ponchó a cinco. En su salida número 500 de su carrera en MLB, sumando temporada regular y postemporada, Scherzer demostró que todos esos años han valido la pena.

Claro, estuvo bastante mal en la recta final de la temporada con los Azulejos y batallando con su cuerpo, como cualquier abridor de 41 años debería estar, pero su terquedad no fue sin motivo. Scherzer sabía -- y convenció a todos los que estaban a su alrededor también -- que aún tenía algo que ofrecer a los Azulej

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