El caso de Silvia Reyna Mendoza , madre de ocho hijos y residente desde hace casi cuatro décadas en Sacramento (California), ha encendido las alarmas en Estados Unidos. La mujer fue deportada a México pocos días después de denunciar a un contratista de ICE (Immigration and Customs Enforcement) por presunto acoso sexual, en medio de un proceso judicial que incluía una orden de suspensión temporal de deportación.

De acuerdo con Newsweek y KCRA 3 , Reyna Mendoza formaba parte del programa de supervisión de BI Incorporated , una empresa privada contratada por ICE para el control y monitoreo de inmigrantes mediante dispositivos electrónicos. Su familia sostiene que uno de los empleados de BI la acosó durante meses, enviándole mensajes y videos de carácter sexual, e incluso intentó co

See Full Page