El hombre de 57 años que este verano fue atacado con un pico cuando se encontraba en su vivienda en Alcaucín, en la comarca de la Axarquía, continúa ingresado en coma profundo. Según fuentes familiares, se encuentra hospitalizado en una clínica privada situada en Málaga tras haber sido trasladado desde Vélez-Málaga.
La decisión de desplazarlo hasta la capital se habría producido, según un portavoz de sus allegados, por decisión del centro hospitalario. “El gestor ha dicho que no puede seguir allí”, señalan. La familia, sin recursos económicos ni ayudas de ninguna administración, busca ahora una residencia o centro especializado donde pueda recibir la atención que necesita.
El paciente, que permanece intubado, ha perdido un pulmón y sufre coágulos en la cabeza, por lo que requiere aspirac

Diario de Málaga

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