Estos dos puentes festivos en noviembre se consideran, por parte de muchos actores de la cadena turística del país, como el ‘banderazo’ para el arranque de la temporada alta de fin y comienzos de año. Las expectativas para esta época son muy altas e incluso se tiene la esperanza de que su dinamismo sea de tal dimensión que permita compensar algunos resultados regulares en lo corrido de este 2025 en varios de los eslabones de este sector productivo.
Los gremios respectivos tienen balances disímiles en cuanto a cómo se ha ido desarrollando este año. Se destacan los récords en materia de visitantes extranjeros, así como los porcentajes de ocupación hotelera en determinados meses. Las cifras sobre movimientos de pasajeros en transporte aéreo y terrestre también son alentadoras. Los reportes d

El Nuevo Siglo

El País
Fortune
OK Magazine