García Silva residió 36 años en la ciudad de Waco, Texas, donde fundó el restaurante “El Siete Mares”, especializado en mariscos. Su esfuerzo y dedicación lo convirtieron en un referente local y le permitieron ganarse la oportunidad de cocinar para eventos oficiales durante la administración de Bush.

El 25 de marzo de 2025, agentes de ICE acudieron a su domicilio y le informaron que debía acompañarlos. El cocinero fue arrestado ese mismo día y permaneció detenido durante dos meses antes de ser deportado a Monterrey, su ciudad natal.

Aunque no tenía antecedentes penales, García Silva enfrentaba una orden final de deportación emitida en 2002, tras haber sido expulsado y reingresar al país de manera irregular. Esa situación migratoria pendiente derivó en su detención y posterior expulsión.

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