En una época en que el liderazgo se confunde con poder y la inteligencia emocional con frases de autoayuda, Alfred Sonnenfeld reivindica algo esencial: liderar es servir. Este doctor en Medicina y Teología, formado en Alemania, fusiona ciencia y espiritualidad para demostrar una verdad incómoda: que la ética no es solo filosofía, es biología. El cerebro se fortalece cuando actuamos bien, la bondad mejora la salud y servir al otro resulta, literalmente, sanador. A sus 74 años, ha publicado dieciséis libros —cinco de ellos desde la pandemia— movido por un único impulso: ayudar. Su última obra, Liderazgo ético. Cómo influir con el ejemplo (Espasa, 2025), va más allá del manual de liderazgo convencional para convertirse en una brújula de vida.

Con serenidad y pasión a partes iguales, el

See Full Page